La
voluntad de Dios es imposible comprenderla sin la visión de la fe, especialmente
cuando la prueba de la aceptación del mal nos lleva a preguntar como Dios que
es bueno permite el mal; y la respuesta
de nuestra razón sin fe nos llena de ira. El desafío es tener nuestra confianza
puesta en un amor de Dios que no podemos comprender . Y es solo por la fe que
podemos rendirnos, y aceptar
confiando que es una oportunidad que Dios nos da para crecer en amor y virtud,
una oportunidad de crecer y madurar.
Depende de nuestra voluntad responder al amor
y a la confianza, en el libro, cada aceptación de su voluntad, se transforma en un altar de
sacrificio, para poder experimentar una mayor unión con El. Es entonces cuando se alimenta un poco esa
necesidad insaciable de unión de amor que solo Dios puede saciar.
Si es el abandono en su voluntad lo que nos hará
alcanzar esa unión plena ¿Porqué
nos rebelamos y renegamos? Y si la
aceptación de aquello que no nos gusta, es lo que nos llevara a los lugares
altos, a la alegría de conocer el amor de Dios, ¿ Porqué entonces nos
resistimos?
Entonces surge otra pregunta: ¿Como saber cual es la
voluntad de Dios? Su voluntad es que en todo momento y situación confiemos en
su amor a pesar de no comprender nada. !Que difícil imaginar la visión completa
del plan de Dios! El permite el dolor y sufrimiento, a veces como consecuencia
de nuestro pecado y a veces la
causa queda como un misterio, que solo después de haber sufrido podemos comprender que fue una oportunidad
para ser transformados.
Solo nos queda pedirle a Dios que
sepamos aceptar y aprovechar las pruebas para nuestra gracia porque si renegamos y nos llenamos de ira, seguramente serán
para nuestra desgracia, y sufriremos… hasta que decidamos cambiar. Porque su voluntad es que vivamos
alegres en medio de las pruebas, y esto es posible con la Fe.
SENOR
CREEMOS EN TI, PERO AUMENTA NUESTRA FE!
Ana María
“Envuelto en los pañales de la misericordia de Dios, el ser humano crece en el secreto hasta el día en que lo despierta una mirada cariñosa. “ Esperando el nacer.
ReplyDeleteEste instinto por el amor, tan firmemente implantado en el corazón humano, es la manera suprema por medio de la cual aprendemos a desear y amar a Dios mismo sobre todas las cosas.
Al profundizar este mensaje del prefacio, sentí que así como voy aprendiendo a amar a Dios, así también voy conociendo de ese amor tan grande que él me tiene y que desea que perfeccione tanto con él como con mi prójimo. Si amo a Dios, debo también aprender a amar a quien no amo lo suficiente, que necesita de mi amor y de mi entrega, que está esperando una respuesta, un primer paso, un acercamiento, un cambio....
Cuando partió de este mundo uno de los seres que más quiero, comprendí lo que no podía entender cuando la tenía a mi lado, valore y acepte lo que no podía aceptar y valorar antes. Siento que el amor de Dios en nosotros nos envuelve y nos lleva a través de la perdida a una ganancia mayor. El dolor es reemplazado por un amor que no vemos pero que sentimos y nos hace abrazar ese amor, queriendo y aprendiendo a ser mejores personas con los que aun están en nuestras vidas, por ese amor tan grande que sentimos por el que partió. Solo Dios puede llenar ese vacío y enseñarnos a amar más con un amor más perfecto más puro y verdadero. Por Amor a Dios, aprendo a amar a quien no amo o necesito amar más.
Oración de la Madre Teresa de Calcuta :
Querido Jesús ayúdame a llevar Tu fragancia donde quiera que vaya.
Llena mi alma con Tu espíritu de amor.
Penetra y haz tuyo todo mi ser para que así el propósito de toda mi vida sea el de irradiar Tu luz.
Brilla a través de mí de tal modo que con todos los que yo comparta puedan ver y sentir Tú presencia en mi alma y todo mi ser.
Concédeles que al mirarme no me vean a mi sino solo a Ti Jesús.
Quédate conmigo para así poder brillar como Tú brillas, y de este modo ser una luz para los demás.