tag:blogger.com,1999:blog-7433823079024979081.post3065760422870164837..comments2022-04-06T17:48:08.280-07:00Comments on Pies de Ciervas en los Lugares Altos: PIES DE CIERVAS EN LOS LUGARES ALTOS. CAPITULO 16. Sepultura en las MontañasAna Maria Villegashttp://www.blogger.com/profile/03013783285510271595noreply@blogger.comBlogger1125tag:blogger.com,1999:blog-7433823079024979081.post-43078558666683244722011-02-22T17:24:49.506-08:002011-02-22T17:24:49.506-08:00Llegaron a una cavidad, que parecía a una tumba, e...Llegaron a una cavidad, que parecía a una tumba, en el cual no se podía ver su profundidad. Para llegar al destino final del desfiladero tenían que saltar allí. Miedosa sin titubear se cogió de Pena y Congoja y tomo el salto. “El lugar al que fueron a parar era profundo y de haber estado sola se habría herido en la caída. Sin embargo, sus compañeras eran tan fuertes que el salto no parecía causarles ningún daño, y la cargaron con mucha facilidad entre las dos y amortiguaron la caída con tanta suavidad que lo único que sufrió fue una rozadura y una sacudida.”<br /><br /><br />Me encanto esta alegoría del libro que muestra tan gráficamente que solo cuando se confía puede uno abandonarse en su voluntad y tomar ese salto de confianza. Ese SALTO AL VACIO nos lo explica mejor Santa Teresita de Lisieux,”¡Qué dulce es el camino del amor! ¡Cómo deseo guiarme con el más absoluto abandono a cumplir la voluntad de Dios! (MA f. 84) Mi camino es todo de confianza y de amor… Veo que basta reconocer la propia nada y abandonarse como un niño en los brazos de Dios (Carta 203). Este camino es el abandono del niñito que se duerme sin miedo en los brazos de su padre (MB 1). El abandono es el fruto delicioso del amor (poesía 42).” Miedosa ahora era la cascada que tanto había admirado en el capitulo anterior y así como la cascada cae para seguir el camino, así ella cae para seguir el camino de su voluntad. Y podremos nosotros también decir la simple y bella oración que Santa Faustina Kowalska nos enseña, “Jesús, en ti confío.”<br /> <br />Y seguimos viendo el abandono de Miedosa, “En todo el mundo había una sola cosa que importaba de verdad; hacer la voluntad de Aquel que ella seguía y amaba, sin importar cual fuera el precio. Era bastante extraño, pero cunado se arrodillo allí en el altar, al parecer abandonada en esa última y, tremenda crisis, no había señales ni sonidos de la presencia de sus enemigos…como si ella estuviera en un mundo diferente por completo…No sentía nada, sino una gran quietud en la que solo permanecía un deseo; hacer lo que El le dijo, solo porque se lo pidió….una llama ardía, en su corazón, sin cesar, la llama del intenso deseo de hacer la voluntad de su Señor. Todo lo demás estaba muerto y convertido en cenizas.” <br /><br />Ya después en el altar el sacerdote le arranco de Miedosa el amor humano y tomo la planta madura y la lanzo sobre el altar donde se consumo en una llama de fuego. Entonces pensé esto era el ultimo obstáculo que tenia que vencer para estar libre de todos sus miedos y poder recibir lo que tanto anhelaba, los pies de ciervas. Y veía la similitud de este relato con Mat 13:30 cuando se separara la mala hierba del trigo y se mandara a quemar. También este relato me recordó de Gedeon en Jueces 6:21-25 que quería una prueba que en verdad era Dios que le daba la orden a liberar los Israelitas. Fue entonces ordenado a sacrificar un cabrito con panes en el altar y cuando el Ángel toco la ofrenda con la punta de su bastón se consumo todo en una llama de fuego. Veía todo esto como el libro mostrándonos que es Dios quien recibe la ofrenda de nuestra entrega y la consume en el fuego de su amor.<br /><br />Cuando llegamos al grupo y nos contó Ana María lo que había pasado en realidad es que Miedosa se había muerto quede un poco desconcertada. Como que murió? Y sus pies? Pero entonces fuimos hablando que así es la muerte, un simple pasar de un estado de vida a otro estado de vida. Y que la muerte podía ser muchas cosas como una mudanza, un nuevo trabajo, un divorcio, etc. que requiere una renuncia nuestra y una apertura a un nuevo comenzar. Y hablábamos que lindo que el libro nos mostraba que no tenemos que tenerle miedo a la muerte, porque Cristo venció la muerte! (1Corintios 15:55)Angelanoreply@blogger.com